Me llega una invitación para meditar en Bali, Islas Hawai; también otra variable en Punta Cana; ambas dentro de un programa de turismo místico bautizado como “Vacaciones Inteligentes”. Se incluye el programa y el precio: Coaching, Atención Plena, Mindfulnnes, Zen para ejecutivos… La de Dios, y nunca mejor dicho. Todo esto dentro de un con-texto temporal en el que me indican que hoteleros y gerentes, devenidos en Maestros, palían la crisis incrementando su sobresueldo desarrollando conciencias ajenas y bolsillos propios. Todo un alarde del posmoderno despertar en el bien organizado mercado contemplativo donde en escenarios paradisíacos se combina el despertar búdico confines de semana románticos donde el champagne riega los cerebros dormidos transmutándolos en inteligentes. Aunque aprecios solo aptos para pudientes.
Coaching es definido como «el arte de conseguir que el otro saque la mejor versión de sí mismo» o «conducir a alguien desde el lugar en el que está hacia el que desea». Suele ser aplicado y orientado al mundo empresarial, donde logra su máxima difusión…
NOTA. En los folletos que me llegan no aparecen expertos en coaching que orienten a las víctimas de una crisis provocada por los asiduos clientes, tan inteligentes.
Pues eso.