Alfonso Arámburu, pertenece a la floreciente sangha de Vitoria, donde imparto una vez al mes zazenkai. Es un hombre especial, como casi todos los componentes de esa comunidad, que ha traspasado la muerte, así como un caminante-meditador que conoce los montes bajos y altos de Euskal-Herria. Podría decir que es un buen salvaje al estilo de Rousseau, aunque, a diferencia del filósofo francés, sabe trascender el tiempo y el lugar.Con motivo de mi estancia de ayer en Vitoria, he recibido de Alfonso este hermoso mensaje, que quiero compartir:
Nuevo trazo del tiempo. Preludio del vacío. Antigua espera. Aire frío. Pausadamente ando sin moverme. Al calor de compañías sencillas, la música se difumina en conversaciones hiladas en un tapiz invisible. Tibio aroma de miradas dispuestas al encuentro y el estar sencillo. Sin más fluimos. Sin proceder amargo, sonrisas a granel por la lluvia vertida. Gracias por vuestros corazones dispuestos sin alardes. Por el brindis achampanado con buen destino para todos. Por el chocolate con bollos de esta infancia eterna que nos alumbra las sombras. Por acercaros a mi bosquecillo en esta tarde torrencial donde los grillos se esconden y la luna se cubre tras los anillos de saturno. Gracias por los presentes, sobre todo por el mejor que siempre traéis que sois vosotros mismos, vertidos en mí con vuestro tiempo, que tanto me alumbra aunque a veces me calle la alegría que me ilumina al veros. Mi Ser despierta y saluda vuestro rastro, se congratula por las biografías cruzadas en las que tantas veces encontramos la unidad de lo bueno. Sois nutriente y deseada compañía. Os saludo y reconozco desde lo más blando que el mundo es más bonito con vosotros. Que la amistad y el Amor nos nutran siempre. Que nutramos a muchos. Que salvemos la inocencia y la vida en todos los ámbitos. Que nos celebremos mucho. Feliz Cumpleaños con vosotros forever.
Os dedico esta canción…
The Inner Light (The Beatles -Harrison-)
Sin salir de mi puerta puedo saber todas las cosas de la tierra.
Sin mirar por la ventana puedo recorrer los caminos del cielo.
Cuanto más lejos viajas menos sabes.
Llega sin viajar. Ve todo sin mirar.
Canción inspirada en este texto del Tao te kin de Lao Tse:
Dentro de las puertas de tu casa está todo el universo. Sin mirar por la ventana se contemplan todos los caminos del cielo. Si vas muy lejos conocerás poco. El sabio aprende sin moverse, comprende sin mirar, realiza sin actuar.