Vacuidad y entrega

Me dice mi amigo Vicente: la vacuidad es un niño que nos pide pan, un verdadero compromiso con los que no lo tienen; un compartir las penas de este mundo desde el entero reconocimiento de este mundo y de sus penas. Vivir en la vacuidad es hacerlo en la profunda alegría de que Seguir leyendo Vacuidad y entrega

La institucionalización del Ser

El ser humano se engrandece cuando se eleva por encima de sus obras para no desear otra cosa que otear el Ser, desearlo, vivirlo las 24 horas, siendo así cuando accede al camino de su verdadera patria. Sin embargo, esto es fácil -demasiado fácil- de enunciar, ya que estamos hablando de tener el valor de desapegarse de la obra de toda una vida, la que con dedicación y mimo quizá durante muchos años llevamos a cabo. Estamos hablando de un renunciamiento liberador que Seguir leyendo La institucionalización del Ser

Paisaje inmóvil

El alba, hipnotizada de silencio,
despierta en su grandeza iluminada.
Como si la Naturaleza, inmóvil,
se dejara habitar por lo indecible.

El fresco corazón de la Materia,
palpita en cada forma estremecida.
Ya, grávida, la tierra, va extendiendo
los pliegues de sus alas incendiadas.

Estallan las primeras claridades
y de sus hondos senos, como un ascua,
se alza la meseta amanecida.

Corre, embriagado, el aire por los trigos,
y abrazando los mares de amapolas,
se eleva a las raíces de la altura.

Meditación Bilbao