Son tiempos, estos, de cuidarnos mutuamente y acompañarnos desde la solidaridad y la empatía.
Informarnos seriamente con fuentes oficiales (sugiero no mirar tanta TV) y ocuparnos del tema sin entrar en paranoia.
Conectar con las fuentes máximas de energía (naturaleza, meditación, alimentación saludable, alguna secuencia simple de yoga, por ejemplo, y una respiración conciente) nos permitirán transitar estos tiempos de nerviosismos, stress y cambios profundos.
Esto también pasará…
Les dejo la poesía de Rafael para que resuene en sus corazones, se transforme en acción y sea respuesta amorosa 🙏
«Hazle llegar, soplando y resbalando por tus palmas,
el beso que diriges hacia ese rostro,
y el abrazo apasionado que hoy no puedes.
Haz que, también, tu aliento enamorado,
alcance el pecho de quien amas,
su espalda, sus cabellos, las venas de su alma,
ahora tan distantes.
Y hazte la promesa, te lo ruego,
de que ese espacio que ahora nos separa,
más temprano que tarde
tornará en hacerse cuerpo y en carne,
Fuente de Vida, y de Bondad semilla.
Porque hace décadas muy largas que los señores del miedo se empeñaron en que aprendieras
a separar,
aislar,
competir,
a amedrentar…
Quién sabe -tú, sin duda, sabes-,
cómo desaprender lo que separa,
restaurar la unidad,
reinventar el amor…
Culminar el abrazo, inventar otro mundo,
hacer posible otro universo
vivir de otra manera…
Si todo eso es posible, me preguntas.
Para hacerlo posible hemos nacido,
los vulnerables ansiamos tu respuesta.»
Ilustración: Ellen Brenneman
Texto introducción: Adriana Marcela Arecco
