Oh Dios Haz que no fracase ni me desvíe ni en la prosperidad ni en la adversidad; que no me enaltezca por una ni me abata por otra. Que no me alegre sino de lo que me lleva a Ti, ni me aflija sino de lo que me aleja de Ti; que no busque agradar, ni tema desagradar, sino sólo a Ti. Que todas las cosas transitorias se vuelvan viles a mis ojos, oh Señor, y que todo lo Tuyo me sea querido por Ti, y Tú, oh mi Dios, querido por encima de todas ellas. Que todo gozo que sea sin Ti me resulte molesto, y que no desee nada que no sea sin Ti. Que todo trabajo y fatiga que sea por Ti me deleite, y todo descanso que no sea en Ti me canse.
Rafa Redondo
Múisca: Philip Glass – Misihima